Cifras del Banco
Central Fue entre diciembre de 2013 y marzo de
este año. También bajó la cantidad de empresas.
A las flojas cifras del mercado laboral que difundió esta semana
el INDEC se suma un dato objetivo inquietante. Entre diciembre de 2013 y marzo
de este año, se
cerraron 311.746 cuentas sueldo. En marzo se registraban 7.717.422 cuentas,
contra 8.029.168 del 31 de diciembre de 2013. Las cifras son oficiales y están
registradas en la página Web del Banco Central. El dato del segundo trimestre
se conocerá en los próximos días.
Tan preocupante como la caída de las cuentas sueldo es la menor
cantidad de empresas registradas que
utilizan estos servicios. Cayeron de 160.083 a 154.493.
Especialistas en el mercado laboral consultados por este
diario señalaron que en este fenómeno puede haber un componente de
estacionalidad en la caída de cuentas, pero mirando la serie estadística hacia
atrás, ese factor puede ser relativizado. Es sabido que durante el verano se
crean empleos temporales, pero también que no todos esos puestos son registrados.
De todos modos, en diciembre se había superado por primera vez la barrera de los 8 millones de
cuentas.
Como sea, la caída de este marzo contra diciembre es mucho
más pronunciada que la caída
de cuentas activas en similares períodos de años anteriores. Incluso en marzo
de 2012 se observa un repunte de cuentas contra diciembre de 2011.
De modo que la caída de cuentas sueldo puede estar
registrando dos fenómenos. La destrucción de un puesto de trabajo o la
informalización, es decir, un puesto registrado y en blanco que pasó a negro,
bien por la merma en la rentabilidad del empleador, bien porque la presión
fiscal que lo llevó a negrear el salario de su empleado.
“Está costando mucho abrir cuentas sueldo, es un síntoma
claro de que la realidad de nuestros clientes está difícil”, señaló a este
diario un ejecutivo de un banco extranjero, que se sorprendió, pero no tanto,
por la caída del stock de este tipo de cuentas.
Los bancos privados
son los más afectados por el cierre de cuentas.
De las 311 mil que se cerraron, el 83% estaban abiertas en bancos privados.
El bajón coincide con el inicio de la recesión
económica, que está acompañando toda la gestión del ministro de Economía Axel
Kicillof. Los datos laborales que mostró el INDEC esta semana no muestran todavía
el fenómeno de la destrucción de puestos de trabajo, pero si el índice de
desempleo no cayó más se debió, parece, más al factor desaliento –individuos
que dejan de buscar trabajo- más que al mantenimiento de los puestos laborales.
La menor cantidad de cuentas sueldos puede estar
reflejando tanto una menor cantidad de trabajo como también un
corrimiento del trabajo en
blanco al trabajo en negro.
También está el fenómeno de la inflación. Desde que se
aceleró la suba de precios (la real, no la que mide el INDEC) creció la
inflación pero decreció la tasa de empleo. El fenómeno se hizo evidente en
2011, y se acentúa desde entonces. En 2011 la tasa de empleo llegó al 43% y a
partir de allí no solo dejó de crecer sino que se
contrajo cerca de medio punto porcentual, según un trabajo publicado en el
blog Cosas que Pasan.
La aceleración de la inflación y la contracción
económica seguramente confirmarán la tendencia no solo de las cuentas sueldo
(más allá del fenómeno de la estacionalidad que se explicó más arriba) sino de
aumento de desempleo y caída de la tasa de empleo. No es sorpresa: en los
últimos días las suspensiones y los despidos ocuparon buena parte del espacio
en las informaciones económicas y de las discusiones entre centrales obreras,
gremios y funcionarios.
Y todo esto ocurre mientras el discurso oficial afirma
que las decisiones de política económica que se están tomando son justamente para
cuidar el trabajo de los
argentinos.