Hosni Mubarak lleva 30 años como líder supremo de Egipto. Si bien ese período puede parecer extremadamente largo, lo cierto es que el egipcio es sólo uno de los tantos mandatarios, en su mayoría africanos, que retienen el poder de su país desde hace más de dos décadas.
Muammar al-Gaddafi lidera el raking de los mandatarios más longevos, ya que gobierna Libia de facto desde el 1 de septiembre de 1969, hace más de 41 años. Si bien no tiene ningún cargo público formal, es el hombre fuerte de su país con el título honorífico de "Líder de la Revolución". El segundo puesto se lo lleva Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, que tomó el poder de Guinea Ecuatorial en un golpe de estado en 1979. Cuando llegó al mando, hace 31 años, prometió acabar con la política de represión de su antecesor, su tío Francisco Macías Nguema, a quien ordenó ejecutar. Pero las violaciones a los derechos humanos persisten, mientras Obiang y su familia son prácticamente dueños de la economía del país, con grandes riquezas petroleras. El podio lo completa Robert Mugabe. A sus 86 años, lleva 30 como líder supremo de Zimbaue (aunque oficialmente ejerce el cargo de primer ministro desde 1987). Si bien participó en el movimiento de liberación de su país en décadas anteriores, al llegar al poder se volvió un déspota que persigue a la oposición. Después de Mubarak, que ocupa el cuarto lugar, el quinto mandatario con más años en el poder es el camerunés Paul Biya, que es presidente desde el 6 de noviembre de 1982 (28 años). Le sigue Yoweri Museveni, que gobierna Uganda desde el 29 de enero de 1986 (24 años). En séptimo lugar aparece Blaise Compaoré, presidente de Burkina Faso desde el 15 de octubre de 1987 (23 años). Omar Hasan Ahmad al-Bashir gobierna Sudán desde el 30 de junio de 1989 (21 años). Islam Karimov es el presidente de Uzbekistán (único país fuera de África en el ranking) desde el 24 de marzo de 1990 (20 años). Por último, el general Idriss Déby está al mando de Chad desde el 2 de diciembre de 1990 (20 años). |
