Ambas iniciativas buscan democratizar el acceso a las tecnologías. La inversión prevista es de 8000 millones de pesos. Se ampliará la red de fibra óptica y se construirán centros de acceso gratuito a Internet. También se anunció la inauguración de cuatro torres de TDT.
Cristina Fernández de Kirchner presentó ayer el Plan Nacional de Telecomunicaciones "Argentina Conectada" y detalló los avances en la implementación de la Televisión Digital Terrestre (TDT). Ambas iniciativas tienen por objetivo democratizar el acceso a las nuevas tecnologías y lograr de ese modo una mayor integración del territorio nacional. La inversión prevista es de 8000 millones de pesos y se desembolsará durante los próximos cinco años. Entre las medidas que se difundieron sobresale el nuevo papel que cumplirá la empresa estatal AR-SAT, que tendrá a su cargo la expansión de la red de fibra óptica y además se convertirá en proveedora mayorista de banda ancha de pymes y cooperativas. También se anunció la construcción de centros públicos desde donde se podrá acceder a Internet de manera gratuita y la inauguración de las cinco primeras torres de transmisión de la TDT.
El anuncio se realizó en el ex Palacio del Correo, donde ahora funciona el Centro Cultural del Bicentenario. La Presidenta encabezó el acto junto al ministro de Planificación, Julio De Vido. En un segundo plano estuvieron el resto de los funcionarios que integran el gabinete y gobernadores de varias provincias. El evento comenzó con la proyección de un par de propagandas que se utilizarán para promocionar el plan de inclusión digital.
Luego se realizó una videoconferencia con el Centro Emisor Satelital que AR-SAT montó en Benavídez y que ayer comenzó oficialmente a distribuir señales a las cinco primeras torres de transmisión de TDT, montadas en las localidades bonaerenses de La Plata, Baradero, Campana, Cañuelas y la ciudad chaqueña de Resistencia. Esas torres retransmitirán en la banda UHF mediante una antena de banda ancha en un radio aproximado de 40 kilómetros a la redonda. Según el ministro de De Vido, brindarán cobertura a 1,5 millón de habitantes. El ministro confirmó además que para junio del año próximo estarán listas las 42 torres restantes que ya se habían anunciado y con las que se prevé cubrir al 75 por ciento de los hogares del país.
Esa medida se viene complementando con la distribución de conversores entre los sectores de bajos recursos para que las señales digitales comiencen a tener audiencia. Hasta ahora, se distribuyeron 170 mil aparatos y, como la oferta de contenidos es limitada, su uso también lo es. No obstante, Cristina Fernández de Kirchner prometió ayer que la oferta de señales se ampliará en los próximos meses (ver aparte) y les pidió públicamente a las grandes cadenas de retails que comiencen a ofrecer los deco, aunque todavía no sea un negocio apetecible para esas firmas.
Además de dar cuenta de los avances en la implementación de la TDT, ayer se anunció la puesta en marcha de un Plan de Telecomunicaciones que busca democratizar el acceso a Internet. Cuando estalló el conflicto con Fibertel, el Gobierno apeló a las pymes y cooperativas telefónicas para tratar de consolidar una oferta alternativa de banda ancha, pero esas firmas le pidieron que antes intercediera ante Telefónica y Telecom para forzar una baja en el precio de los megas que venden en el mercado mayorista, pues si no les iba a ser imposible realizar una oferta de calidad a precios competitivos. El Estado intervino y logró que las telefónicas dominantes bajaran sus precios, pero fue apenas un "parche", porque los desequilibrios en el mercado continúan.
El anuncio de ayer busca dar una respuesta estructural a esos problemas a partir de una intervención estatal activa que estará a cargo de la empresa AR-SAT. Esta firma se dedicará a partir de ahora a ampliar la red de fibra óptica y proveer Internet en el mercado mayorista. El objetivo es construir en una primera etapa 10.000 kilómetros de fibra nuevos y luego llegar a 35.000 kilómetros, aprovechando el trazado de las líneas de alta tensión y los gasoductos. En el documento que se distribuyó ayer se afirma que el objetivo de Articom (la marca con la que va a operar AR-SAT en este mercado) no es "sustituir o limitar a las empresas privadas o públicas provinciales, sino impulsar la construcción de infraestructura nacional complementaria". No obstante, si se consolida como un actor de peso, en el mediano plazo la competencia con las telcos será inevitable y la firma estatal comenzará a fijar un precio testigo.
Esta medida pareciera ser una de las contrapartes que Telefónica y Telecom aceptaron para que el Gobierno finalmente desistiera la semana pasada de su intención inicial de obligar a los italianos a desinvertir en el país luego de su alianza europea con los españoles. Incluso fuentes oficiales señalaron ayer a este diario que al menos una parte de la expansión de la red de fibra se financiará con los aportes que realicen Telefónica y Telecom al Fondo del Servicio Universal.
El resto de los recursos se podría obtener a partir de la licitación de las frecuencias para servicios celulares. Son 127,5 megahertz (mhz) del espectro radioeléctrico: 30 mhz de la banda de 1900; 7,5 mhz de la de 850 y otros 90 mhz de la banda de 1700 a 2100. Los primeros 37,5 mhz son los que liberó Telefónica luego de fusionar las firmas Unifon y Movicom dando lugar al surgimiento de Movistar, pues las compañías de celulares tienen un límite de 50 mhz para operar. En el Gobierno estiman que la licitación de esas porciones del espectro le podrían reportar 2000 millones de dólares.
La expansión de la fibra óptica no sólo servirá para forzar una baja de precios en el mercado de Internet sino también para ofrecer banda ancha gratis en lugares públicos. El Gobierno anunció que tiene previsto construir 350 Núcleos de Acceso al Conocimiento (NAC). Son espacios de conectividad gratuita dispuestos en diversos puntos del país. Tendrán salas equipadas con computadoras, servicio wi-fi para que los usuarios puedan conectarse con sus propias máquinas, microcine digital y sala de juegos. Ya están funcionando cinco NAC. Uno en la localidad santafesina de Granadero Baigorria, dos en Jujuy (Palpalá y San Salvador) y dos en San Juan (Villa Media Agua y Chimbas). No obstante, lo más importante es que ya se compró el equipamiento para montar otros 150 y se llamó a licitación para sumar 200 más.
El plan de inclusión digital prevé además Puntos de Acceso Digital (PAD). También son espacios públicos de conectividad donde habrá Internet gratis. Habrá dos tipos de PAD: los verdes y los azules. Los primeros serán al aire libre, por ejemplo, en plazas. Mientras que los segundos funcionarán en espacios cerrados comunitarios como escuelas públicas, centros recreativos y bibliotecas populares.
http://www.pagina12.com.ar/diario/economia/2-155315-2010-10-19.html