Se trata de Raúl Martínez, quien presidía la empresa tecnológica estatal. La nueva gestión designó como gerente general al actual presidente Pablo Tognetti.
Arsat fue una de las últimas empresas estatales en cambiar su directorio, con la asunción del nuevo gobierno de Alberto Fernández. Recién la semana pasada asumió el nuevo presidente de Arsat, Pablo Tognetti, quien fue designado en simultáneo como su gerente general en la compañía estatal, que depende del jefe de Gabinete, Santiago Cafiero.
Nadie imaginó que su antecesor en el cargo, Raúl Martínez, se iba a atrincherar en la empresa tecnológica estatal, renunciando sólo como presidente del directorio, pero queriendo mantener su cargo de gerente general, en superposición con la nueva conducción de Arsat. Por eso, el directorio cesó en el cargo a Martínez, quien se niega a renunciar y reclama una doble indemnización a la actual gestión.
Clarín intentó comunicarse con Martínez, pero el (cesado) funcionario macrista no quiso hacer declaraciones a este diario. Sin embargo, fuentes del Gobierno confirmaron la extraña situación y dijeron que esperan que en estos días renuncie no sólo Martínez, sino también otros 10 funcionarios políticos de la anterior gestión (7 gerentes y 3 subgerentes), que están reclamando doble indemnización para dejar sus cargos.
"Se les pidió la renuncia a todos los cargos políticos, pero ninguno quiere renunciar. Todos quieren indemnización", dijo una fuente oficial. Y añadió que además Martínez hizo numerosos gastos irregulares, "ninguno de los cuales pasó por el directorio", como "la construcción de un helipuerto, que nunca se usó, hasta que vino un helicóptero el viernes pasado, para hacer pruebas de la Policía Federal, que nadie sabe quién lo llamó".
Fuente: Diario Clarín
Fuente: Diario Clarín