Niños y
adolescentes del conurbano bonaerense y Gran Córdoba atraviesan la situación más deficitaria
en cobertura de salud, según un estudio de la UCA.
En los centros urbanos del país, el
22,2% tiene las necesidades básicas insatisfechas .Casi cinco de cada 10 chicos aún carecen de un sistema de cobertura de salud en
Argentina, según el último informe Barómetro de la Deuda Social de la Infancia de la Universidad Católica Argentina (UCA). Esta situación, que afecta al 46,2% de
los niños y adolescentes en los grandes centros urbanos del país, se refiere a
la falta de obra social, mutual o prepaga.
La situación de
vulnerabilidad depende del lugar que se analice. El conurbano bonaerense y Gran Córdoba –que
incluye la ciudad de Córdoba y el área metropolitana que la circunda– son los
lugares con mayor déficit en salud, con un 53,0% y 48,4%
respectivamente.
Mientras que en
el resto de los aglomerados urbanos del interior proyectan una situación
cercana al promedio nacional, la situación es menos deficitaria para niños y
adolescentes en la ciudad de Buenos Aires,
pues la falta de obra social sólo afecta a dos de cada 10 chicos.
A falta de una
cobertura médica, el estudio también analiza la distancia de servicios públicos
como hospitales y salas con
respecto al hogar del chico. Y es considerado como un "factor de vulnerabilidad" cuando el recorrido supera las 10
cuadras.
A pesar de la
vulnerabilidad en la atención de salud,
en la gran mayoría elestado de salud se
calificó como "muy bueno" (60,5%) y "bueno" (36,1%) según
los adultos de referencia, como madre, padre o adulto responsable de la
crianza.
El análisis
también se centra en los datos de pobreza e indigencia de la niñez. En este
sentido, el 22,2% de los menores de hasta 17 años en los grandes centros
urbanos de Argentina poseen las necesidades básicas
insatisfechas (NBI).
Este indicador
se encarga de medir la "pobreza estructural", e incluye
características de condiciones de vida –higiénicas, ambientales, de vivienda–
más allá de los ingresos mensuales del hogar que habita el niño o adolescente.
La ciudad de San Miguel de Tucumán y
sus alrededores registró el índice más alto con carencias básicas, pues afecta
al 28,4 por ciento de los niños.
Por ejemplo, el
40% de la niñez y adolescencia urbana en 2012 residía en viviendas sin acceso al gas de red, situación de déficit que no
experimentó variaciones indicativas en los últimos tres años. Y el 17,1% de la
infancia y adolescencia en viviendas que no tienen acceso a agua
corriente.