lunes, 6 de noviembre de 2017

Un viaje por las entrañas de la web / Desiree Jaimovich

La magia de la red no ocurría sin los centro de datos. Un recorrido por uno de estos espacios repletos de cables y maquinarias que permiten que la información circule y se replique en el ciberespacio

En medio de una tranquila calle del barrio de Belgrano, rodeado de silencio y arboleda se encuentra uno de los centros de datos o data center más antiguos del país.

Si bien el frente es grande, no es suficiente para adivinar la enormidad del lugar: 7.100 metros cuadrados. En ese lugar, que hasta 1997 solía ser una textil, Metrored construyó un data center en 2001. Tres años después la empresa fue absorbida por Telmex y en 2011 se fusionó, en toda la región, con Claro, la compañía a la que ahora pertenece el predio.

Un data center es un espacio con una compleja red de cables y máquinas que permite que la información circule por la web. Esa magia que ocurre cada vez que subimos una foto a la web, que hacemos click en un página para navegar o para enviar un mail está sostenido por una enorme red de maquinarias que hay en los tantos centros de datos que hay en el mundo.

La magia de la comunicación 2.0 está sustentada en una infraestructura gigante. En estos centros de datos, que funcionan las 24 horas los 365 días del año, hay un complejo entramado donde se cumplen estrictas medidas de seguridad para asegurarse de que la información circule sin cortes.

En el data center de Claro que visitamos, hay cuatro transformadores, cinco generadores de emergencia y siete sistemas de alimentación ininterrumpida (UPS, por sus siglas en inglés) que son dispositivos para asegurarse de que haya energía eléctrica y los equipos conectados sigan operativos en caso de un apagón energético.

La potencia para la que está diseñado el data center es de 6.000 kw y los transformadores son cuatro de 3000 Kw cada uno.

Cada UPS cuenta con dos entradas de energía: una es de la red común trifásica de los tableros principales y la otra viene de un banco de baterías. Las dos energías llegan a la UPS que tiene conectado a la salida todo el equipamiento de servidores.

Así, cuando se corta este ingreso de energía trifásica alterna, el equipo conecta las baterías, la transforma en alterna y mantiene energizado todos los equipos que tiene a la salida para que no se apaguen.

"Los generadores de emergencia son cinco y se utilizan tres para cumplir con la potencia que hoy se consume, siempre en configuración n+1. Es decir que dos cumplen al 100% y el tercero es por las dudas o por redundancia", explica a Infobae Reinaldo Fabaro, supervisor de contratistas de la Dirección IT del Data Center Claro.

Los racks son armarios donde se encuentran alojados los servidores, que es donde se almacena y protege la información.

La salas grandes donde se albergan los racks tienen 600 metros cuadrados en tanto que las periféricas son de unos 400 metros cuadrados aproximadamente.

Cada rack tiene dos cables que son alimentados por dos circuitos diferentes con sus correspondientes transformadores, UPS y tableros. Así se minimizan las fallas de alimentación.

Todos cuenta con tableros PMM que tienen una entrada de energía, un transformador y una salida por llave térmica. Eso está conectado a una app para monitorear el consumo y asegurarse un rendimiento adecuado.

La información fluye por cables y hay de dos tipos: los de fibra óptica y los UTP (de cobre) que están ubicados en bandejas, en la parte alta de la sala de racks. Todo está milimétricamente pensado en esa inmensidad de máquinas y cables.

El frío, un factor clave

La temperatura de inyección de aire enfriado, en las diferentes, salas es de entre 18 y 20 grados centígrados. Mantener estas condiciones, que se monitorean de forma constante, es fundamental para que el sistema funcione de manera adecuada.

Los racks se refrigeran con el sistema de chillers, que es una unidad enfriadora de líquido y fan coil que es un dispositivo que tiene un intercambiador de frío o calor y un ventilador.

Las salas de rack a su vez cuenta con un pasillo frío en la parte delantera para que los equipos puedan refrigerarse. Y por el pasillo contiguo se expide aire caliente.

Los equipos de aire absorben el aire caliente por la parte superior, internamente lo enfrían y vuelven a inyectarlo por debajo del piso técnico de la sala, saliendo al medio ambiente de la sala por la baldosas perforadas.

Luego de tres horas de recorrido por ese sitio repleto de cables y maquinarias se desvanece la idea de que la web es sólo una nube digital de información intangible. Queda claro que la magia de internet no sucedería sin un correlato físico.

https://www.infobae.com/tecno/2017/11/06/un-viaje-por-las-entranas-de-la-web/

jueves, 2 de noviembre de 2017

Resistencia Ancestral Mapuche: "Son extremistas, desprecian el país" / Senador Miguel Á. Pichetto.

El senador Miguel Pichetto definió al grupo Resistencia Ancestral Mapuche como "violentos, extremistas, negacionistas del territorio (que) desprecian al país y a la bandera argentina". El senador hizo declaraciones a una radio local en Bariloche en el marco de la cual criticó duramente al RAM y a sus aliados a los que definió como "almas nobles", pero, dio a entender, equivocadas.

"Consentimos que haya un territorio sagrado, que las fuerzas de la ley no puedan ingresar y nadie da el debate. Pero en Bariloche, la gente sabe quiénes son los del grupo RAM. Son violentos, extremistas, negacionistas del territorio, desprecian al país y a la bandera argentina y vienen haciendo destrozos en todos los caminos turísticos", dijo el funcionario a FM 93.7 de la localidad.

El senador subrayó que su posición no es contraria a los pueblos originarios sino a los grupos radicalizados que vienen operando en la Patagonia. "No tengo nada contra las comunidades originarias, creo que la mayoría son pacíficas. De hecho, yo acabo de votar a favor de la prórroga de la Ley de Territorios de Comunidades Originarias para que no los saquen, para que se extienda la posesión hasta que se dirima dentro del marco legal la legitimidad del reclamo", señaló.

Pero su visión respecto del RAM es muy distinta, advirtió. "Han quemado un edificio histórico como el refugio Neumeyer. Hay que hablar con la gente del Club Andino Bariloche, hay que propagarlo a nivel nacional para que la gente sepa. Avalar la violencia, que reclamen con caras tapadas y que van a tomar la Municipalidad de El Bolsón, sin que exista la ley, eso está muy mal. Hay cosas que están mal, que no están funcionando y no hay discusión sobre este tema", declaró.

Para el senador existen una brecha profunda entre el reclamo ancestral y los atentados que vienen caracterizando al RAM. El grupo fue fundado por el lonko Facundo Jones Huala que hoy está detenido en Esquel a la espera de un juicio por extradición.

"Una cosa son los derechos legítimos de las comunidades originarias que reclaman en forma pacífica y discuten frente al Estado cuestiones que son de sus ancestros y que las reivindican como propias. Y otra cosa son las acciones violentas, NEGACIONISTAS DEL ESTADO NACIONAL. Este es el debate que hay que dar", afirmó.

"Yo conozco algunas almas nobles que estuvieron preparando y haciendo actividades, conozco el tufillo que hay con esta ideología dura que viene de la cordillera y que cruza la República de Chile, no lo miremos con ingenuidad", agregó.

También dejó palabras sobre el caso Maldonado. "La desaparición de Santiago Maldonado, y la aparición muerto de este muchacho tiene que esclarecerse y el gobierno tiene que hacer todo lo posible para que tengamos certeza de lo que sucedió, pero este hecho nos impide debatir el fondo de esta cuestión", concluyó.

A principios de mes, el senador Pichetto ya había atacado el funcionamiento del RAM en el sur. "(Hay que) separar a estos grupos violentos que tienen una construcción cordillerana que supera los límites de la Provincia y de la Argentina. Hay una ideología que habla de levantarse en armas, que niegan el estado nacional. Hay que leer y escuchar a este sujeto Jones. Se han consolidado", dijo en ese momento.


#Resistencia Ancestral Mapuche #Miguel Á. Pichetto  # Facundo Jones Huala #RAM  #Mapuches 

lunes, 30 de octubre de 2017

El día que volvimos a votar [30-octubre -1983]

Raúl Alfonsín fue electo presidente después de más de siete años de dictadura. El peronismo perdió por primera vez en comicios libres. Cierres de campaña multitudinarios. Encuestas que recién asomaban. El inicio de un nuevo tiempo.

Con un clima político impresionante como antesala, la jornada del 30 de octubre de 1983, en la que Raúl Alfonsín fue elegido presidente después de siete años y siete meses de dictadura, marcó un rumbo en muchos sentidos para la historia de la democracia argentina.

Fue la primera vez en sus entonces 37 años de existencia que el peronismo perdió una elección en comicios libres, aunque también fue la primera vez que se presentaba sin su líder, fallecido en 1974. Por otra parte, fue la primera vez desde 1928 que el radicalismo superó el 50 por ciento de los votos a favor. El resultado sorprendió a todos. El mismo Alfonsín, recién electo presidente, confesó que esperaba un triunfo por 5 puntos porcentuales y nunca soñó con obtener el 51,9 por ciento que lo ubicó a 11 puntos de ventaja del Partido Justicialista.

La dictadura, acorralada por su propia impericia, y la resistencia cada vez más activa de sindicatos, organismos de derechos humanos y movimientos populares, quedó en una situación insostenible a partir de la derrota en la guerra de Malvinas y propició el 1º de julio de 1982 el camino hacia una salida electoral. La crisis económica y social era de las más agudas que se habían conocido. El 18 de agosto de 1983 se lanzó la campaña electoral y un mes después la Junta Militar decretó la ley de pacificación nacional, una amnistía para todos los crímenes cometidos entre el 25 de mayo de 1973 hasta el 17 de junio de 1983. El candidato justicialista, Italo Argentino Luder, declaró que respetaría esa ley, el radical anunció que la vetaría. Los perfiles de ambos candidatos se dibujaban con claridad. Luder fue el firmante del decreto de aniquilamiento a la subversión cuando le tocó ser presidente interino en 1975. Alfonsín fue miembro de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos y durante la guerra de Malvinas alzó su voz en contra.

La sociedad argentina de 1983 era distinta de la que el golpe de Estado de 1976 privó de la posibilidad de expresarse. Cinco millones de nuevos votantes y una experiencia traumática hicieron sintonía con el candidato que con un enorme carisma recitaba en actos, cada vez más populosos, el preámbulo de la Constitución. Y poco a poco toda la UCR se avino a disciplinarse con él y su estilo novedoso, como un profesional equipo de asesores de campaña conducidos por David Ratto. Como señala el sociólogo Gabriel Vommaro, una de las características del nuevo electorado es la aparición del votante independiente, ése que no tiene identidades fijas de por vida, que fluctúa. Eso generó un fin de las certidumbres y ese vacío lo vinieron a llenar las encuestas. El indeciso pasó a ser una realidad mensurable y Alfonsín se lanzó a conquistarlo: "Ya no habrá sectas de nenes de papá, ni de adivinos ni de uniformados, ni de matones para decirnos qué tenemos que hacer con la patria... no hay dos pueblos, hay dos dirigencias, dos posibilidades. Pero que nadie se equivoque: hay un solo pueblo" y coqueteaba con los peronistas: "Hoy muchos peronistas, sin renunciar a su condición, nos van a votar a nosotros". El peronismo, en cambio, actuó como antaño, apelando a la identidad histórica, acusando al candidato opositor de ser el representante de Coca-Cola. Con una lógica verticalista, pero con demasiados caciques. Apostando a consolidar la propia base. Con eso siempre había alcanzado. Ya no fue suficiente.

Se llegó a las elecciones sin un claro favorito. Las encuestas no eran tan comunes como en la actualidad y la competencia se establecía en otros rubros, otras guerras de números. La afiliación conoció cifras absolutamente asombrosas: el PJ 2.795.000 y la UCR 1.400.000 afiliados. Los actos de campaña congregaban verdaderas muchedumbres y los medios comparaban cuánto había llevado cada candidato. Los actos de cierre constituyeron acontecimientos en sí mismos. El 26 de octubre la UCR y el 28 el PJ convocaron en la avenida 9 de Julio, frente al Obelisco, más de un millón de personas cada uno. Cifra impensable para las campañas actuales que alternan entre actos modestos y caminatas entre desprevenidos vecinos.

Como un dique que se levanta ante una enorme presión, el hambre de participación política se respiraba en las calles, en las esquinas se discutía política, historia, ejemplos internacionales, filosofía. En los medios de comunicación afloraban los debates, la censura aflojó y se oyeron por fin las voces que las generaciones más jóvenes no habían podido conocer. Los artistas le cantaban al pueblo y a la democracia. El ángel de la historia sobrevolaba y parecía que todo volvía a ser posible. Los partidos políticos salieron a la luz del día y abrieron locales partidarios por doquier. En las canchas, en los boliches, en las marchas se cantaba "Paredón paredón, a todos los milicos que vendieron la nación".

Las fórmulas

Doce fórmulas presidenciables se presentaron a competir aquel 30 de octubre. Las más destacadas fueron la Lista 3, UCR con el binomio Alfonsín-Víctor Martínez; la Lista 2, del Partido Justicialista con Luder-Deolindo Felipe Bi-ttel y las candidaturas, entre otros, de Oscar Alende, Alvaro Alsogaray, Rogelio Frigerio y Jorge Abelardo Ramos. Como curiosidad, señalemos que el más joven de aquellos candidatos a presidente, Luis Zamora, por la lista 13 del MAS, es el único que también se presentó como candidato 30 años después en estas legislativas.

Casi 18 millones de argentinos estaban aptos para votar. Los padrones se actualizaron hasta 6 meses antes, por lo que muchos que tenían 18 años cumplidos no pudieron participar. Hoy los que votan son 30 millones. La reforma constitucional de 1994 generó que muchas prácticas electorales hayan caído en desuso. Se debían cubrir 14.512 cargos electivos, entre ellos 254 diputados y 46 senadores. En rigor, la Constitución que regía entonces establecía que el voto a presidente era indirecto, se votaba a 600 grandes electores que debían reunirse y decidir quién ganó; salvo que alguno de los candidatos obtuviera la mayoría absoluta, que fue lo que finalmente ocurrió al obtener Alfonsín 318 electores.

La jornada fue tranquila, sólo unos pequeños incidentes. Como de costumbre, se televisaron los momentos en que los candidatos votaban. Pero el escrutinio fue lento. Los datos llegaban con cuentagotas y los bunker del PJ y la UCR proclamaban la victoria. Una algarabía desbordante se instaló en el comité de la UCR, donde los primeros datos oficiales empezaban a darle una leve ventaja. Desde el PJ se argumentó que se estaban ocultando los datos del conurbano y que se quería instalar la idea de un empate técnico para influir sobre el Colegio Electoral. Afirmaron que un aluvión de votos del conurbano se estaba demorando. De hecho, el candidato a gobernador por el PJ de la provincia de Buenos Aires, Herminio Iglesias, estuvo toda la jornada, hasta bien avanzada la noche, propalando un mensaje triunfalista. Pero como consigna Oscar Raúl Cardozo en un artículo del día siguiente; a las 23.30 la resistencia a aceptar la realidad comenzó a derrumbarse. Los cómputos oficiales marcaban la firme tendencia del veredicto popular. Desde el comando central justicialista se intentó infructuosamente obtener las cifras bonaerenses con el anhelado aluvión.

La soledad de Luder a esas horas era escalofriante. Sólo Saúl Ubaldini, secretario general de la CGT; Antonio Cafiero, antiguo rival de Luder en la puja interna; Miguel Unamuno y Julio Bárbaro, diputados electos por la Capital Federal, cumplieron con la elemental solidaridad de acompañar a quien hasta esa noche había sido proclamado y sostenido como el "candidato del consenso y la unidad del peronismo".

Uno de los fenómenos más peculiares de las elecciones fue que el partido derrotado a nivel nacional triunfó en el provincial y logró el control de la Cámara de Senadores. El PJ se impuso en 12 provincias. La UCR en 8.

Carlos Menem, desde La Rioja, fue electo nuevamente gobernador y declaró: "Dimos un paso atrás". El justicialismo empezó a ver en el sindicalismo encabezado por el legendario líder metalúrgico Lorenzo Miguel el rostro de la derrota. En el Chaco, el PJ les ganó a los radicales de Luis León por sólo el uno por ciento de los votos. La victoria en Tierra del Fuego le otorgó a la UCR dos diputados, pero en esa época todavía el territorio no tenía representantes en la Cámara alta. En Corrientes, Neuquén y San Juan se impusieron partidos locales.

Los miembros de la Junta Militar y el entonces presidente de facto Reynaldo Bignone decidieron adelantar la entrega del mando, que en un principio estaba previsto para el 30 de enero de 1984 y se acordó con el presidente electo que fuera el 10 de diciembre, Día Internacional de los Derechos Humanos. Uno de los hechos a resaltar es el levantamiento del estado de sitio 48 horas antes de los comicios, por lo que se deduce que toda la campaña se desarrolló bajo su tutela. Para ser exactos, digamos que esta ley represiva rigió prácticamente por más de una década ininterrumpidamente.

Por eso es que la revalorización de la democracia y los derechos humanos estaban presentes en ese nuevo tiempo histórico. Y esto era inédito en la tradición política argentina, en la que se rechazaba de diversas maneras la formalidad democrática en nombre de otros principios trascendentes, como la justicia social, el socialismo, el orden o la modernización y el progreso. Desde entonces, en estos 30 años se eligieron representantes en 16 ocasiones, con gran regularidad. Se concurrió a las urnas algunas veces más si tomamos en cuenta las PASO, plebiscitos y la reforma constitucional. Se votaron cinco presidentes distintos y dos de ellos fueron reelectos. El marco político de la democracia representativa no se discutió entonces, no se discute ahora. Todo lo demás sí se discute. Inclusive la posibilidad de ir hacia una democracia más inclusiva e igualitaria que retome en su seno principios trascendentes. Pero que tanto se discuta, es su marca de vitalidad.

Fuente: pagina 12. 1-232455-2013-10-30.html

viernes, 27 de octubre de 2017

WHATSAPP ahora permite eliminar mensajes ya enviados

Tendrá 7 minutos para tomar la decisión de borrarlos; es posible hacerlo en un chat individual o grupal; la compañía lo irá habilitando en forma gradual a todos los usuarios

 

Paso a paso

1- Seleccionar el mensaje y presionar 'eliminar para todos' dentro del menú. 

2- Si necesitás eliminar más de uno, mantené presionados los mensajes que queres borrar y elegí la opción de 'Eliminar para todos' dentro del menú. Vas a elegir más de un mensaje y eliminarlos al mismo tiempo.

3- Aclaración: para que esto sea posible, todos los interlocutores del chat deberán tener la última versión de WhatsApp descargada, sea cual sea el dispositivo que se use. Te vas a dar cuenta cuando recibas la notificación del mensaje borrado.

4- La opción "Eliminar para mí" permite borrar los mensajes que quieras, pero que sigan en el teléfono del otro usuario. 

Para hacerlo, el usuario tendrá que seleccionar los mensajes que desee eliminar y pulsar la opción de "Eliminar para mí'.

http://www.lanacion.com.ar/2076791-whatsapp-ahora-permite-eliminar-mensajes-ya-enviados


http://www.lagaceta.com.ar/nota/749674/me-gusta/whatsapp-ahora-permite-eliminar-mensajes-ya-hayan-sido-enviados.html

Intervención de Claudio Marín Congreso de FATEL (25.oct.2017)



jueves, 12 de octubre de 2017

Los DUEÑOS de la OFICINA: CÓMO SOBREVIVIR a PSICÓPATAS, NARCISISTAS Y MAQUIAVÉLICOS




Los liderazgos tóxicos son cada vez más comunes lo que obliga al resto de los empleados a habilidades para la convivencia

"El gerente general es un psicópata: la semana pasada echó a dos directores que llevaban décadas en la compañía y no se le movió ni un pelo. Es más: hasta bromeó sobre el asunto en la última reunión con su equipo". "Julieta es una narcisista insoportable. Siempre se atribuye los trabajos que hacemos juntas. Está convencida de que es el ombligo del mundo y ni lo registra". "Creo que renuncio. No lo soporto a Ángel, mi jefe. Es el maquiavelismo llevado a su máxima expresión: es manipulador, sólo le interesa su agenda y no tiene escrúpulos en hacer lo que sea para imponerla".

Es habitual que expresiones como las anteriores resuenen en los pasillos de muchas organizaciones. Aunque existen pocos profesionales de la psicología o de la psiquiatría, en toda empresa pululan los aficionados a aplicar las teorías de Sigmund Freud y de B. F. Skinner. Lo llamativo es que hay estudios que muestran que hay bastante de cierto en sus diagnósticos. Prepararse para convivir con estos personajes es un asunto de vida o muerte profesional.

En su libro Office Politics, el psicólogo inglés Oliver James realiza un detallado análisis de las maneras en que se manifiesta cada una de las tipologías mencionadas en el mundo empresarial. Veamos las características típicas de cada uno.

Psicópatas

Son impulsivos y adictos al riesgo. La falta de empatía es su característica más llamativa: actúan sin preocuparse por lo que siente el resto. Los estudios muestran que hay cuatro veces más este tipo de personas entre los ejecutivos de alto rango que entre la población general.

Narcisistas

Vanidosos y propensos a la grandiosidad. Se sienten superiores a los demás y quieren dominarlos. Tienen inflada la confianza (en general con humo), que, como un enorme globo aerostático, les permite elevarse hasta alturas inimaginables. Creen tener el derecho de ser los amos. Dentro de los altos ejecutivos son más comunes que en los neuropsiquiátricos.

Maquiavélicos

Fenomenales calculadores y conocedores de la naturaleza humana. Son expertos en política y adictos al poder. Su capacidad de anticipar el futuro les da el sostén necesario para manipular a las personas y los hechos en pos de sus objetivos. También aparecen con mayor frecuencia cerca del vértice superior de la pirámide jerárquica que entre el común de la gente.

Para complicar más las cosas, lo habitual es que las cualidades se den combinadas en el mismo individuo.
Una tríada de características que lastima a las personas pero que parece mejorar la performance en el corto plazo, el sueño de cualquier inversor. Por eso -aunque depende de cada cultura, tanto nacional como organizacional- su presencia es tan usual a medida que aumenta la presión por los resultados económicos, ya que la competencia y el triunfo son sus principales motivadores.

Hay ciertas señales que permiten reconocerlos con relativa facilidad. Los psicópatas son expertos en bullying. Son fáciles de identificar por su humor sarcástico, por su prepotencia y por su facilidad en explotar a otros, en especial los más débiles.

Por el contrario, los narcisistas son carismáticos, histriónicos y seductores. Son populares y tienen miles de seguidores en las redes.

Por último, los maquiavélicos tienden a mantener un perfil bajo, que es la manera de observar y operar sobre lo que ocurre sin ser notados. Como "monjes negros", suelen ocultarse tras la sombra de un líder visible que confía en sus instintos e inteligencia para ganar poder. Si forma equipo con un narcisista, es capaz de dominar en cualquier ámbito.

Aunque siempre alguna predomina, tener una de estas cualidades aumenta las probabilidades de poseer las demás. Por eso, los portadores de la tríada pueden adaptarse a cualquier circunstancia para crecer en las compañías.

Con el paso del tiempo este tipo de ejecutivos se convierten en una suerte de agujero negro organizacional: por su posición, es inevitable que atraigan al resto mientras se nutren de la masa de los no pueden escapar de su campo gravitatorio. La clave para resistirlos es mantener suficiente distancia emocional y sentido crítico como para no ser absorbidos por completo.
Para cerrar, tengamos en cuenta una de las sugerencias más sabrosas de James: "Si no se desarrollan las habilidades para negociar con ellos, te comerán en el desayuno".

Señales de alarma

Expertos en acoso
Los jefes psicópatas son fáciles de identificar por el humor sarcástico y el maltrato que dispensan a los más débiles

Poder de seducción
Los líderes narcisistas son carismáticos e histriónicos, y es común que tengan un alto nivel de popularidad entre sus subordinados

Perfil bajo
Los maquiavélicos tienen a mantener el perfil bajo y suelen ocultarse tras la sombra de un líder más visible.

Los autores son profesores de la Escuela de Negocios de la UTDT
http://www.lanacion.com.ar/2071011-los-duenos-de-la-oficina-como-sobrevivir-a-narcisistas-psicopatas-y-maquiavelicos