Una frase de los compañeros de la izquierda gráfica como ninguna
este presente: que el ajuste no lo paguen los trabajadores…La realidad les da
la razón porque estamos soportando durísimos embates desde noviembre pasado, un
efecto domino de incierta data; la depreciación monetaria sumada a la
indetenible inflación de los productos de la canasta básica implican una
atomización del salario….
Ante ello las centrales de trabajadores deberían haber asumido un
rol más comprometido con esta situación a los fines de atender las urgencias de
sus representados.
El reciente pre-acuerdo salarial firmado en los gremios
telefonicos revelan las limitaciones a la hora de acordar guarismos que
satisfagan las expectativas de los trabajadores.
Un 18.5% a partir del primero de julio, pareciera una cifra
razonable, empero venimos con una tasa inflacionaria en el último
semestre cercana al 40% (con el arrastre del último bimestre de 2013); a esto
se agregar que traemos mínimamente un porcentaje de retraso salarial por
estas razones, llegamos a este pre-acuerdo el cual denota una merma del
21.5% en menos, siendo generosos en la apreciación.
Siguiendo con esta cantinela, desde julio-2014 a enero -2015 la
inflación no descansará demasiado, y desde enero impactará el alivio del
segundo tramo del acuerdo de 11.5% hasta junio de 2015….
Si calculamos para el segundo semestre de 2014 una inflación
acumulada del 15% más o menos, entraremos al 2015 con un coeficiente
salarial cercano al 36.5% en menos, restando los 11.5 mencionados a
percibir en febrero podríamos predecir que estaremos un 25% abajo en
enero de 2015; pero esto no termina aquí…porque con ese presente griego tenemos
que remarla hasta junio de 2015…
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